La cuestión no es la visión que uno pueda tener sobre el sexo, sino el derecho a la libertad de expresión — el derecho a tener cualquier punto de vista y poder expresarlo libremente.
El gobierno no es una empresa productiva. No produce nada. En lo que respecta a sus funciones legítimas – que son la policía, el ejército y los tribunales – realiza un servicio necesario para una economía productiva. Cuando un gobierno se sale de estas funciones, se convierte en un destructor de la economía.
Copyright © 2025 Objetivismo Internacional