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Capítulo 11: Capitalismo — OPAR [11-0]

Capítulo 11: Capitalismo

Introducción [11-0]

Objectivism: The Philosophy of Ayn Rand
(«OPAR») por Leonard Peikoff
Traducido por Domingo García
Presidente de Objetivismo Internacional

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* * * 

La política es a la economía lo que la mente es al cuerpo, o lo que una abstracción es a uno de sus concretos. La política identifica los principios que deben regir todos los ámbitos sociales. El sistema político adecuado por lo tanto incluye como uno de sus aspectos el sistema económico adecuado. La moralidad determina la política, como su aplicación a la interacción humana organizada; y la política a su vez determina la economía, como su aplicación al campo de la producción y el comercio.

El objetivo de la ciencia económica es identificar cómo los principios de una política adecuada funcionan de hecho en relación con la vida productiva de los hombres (y qué ocurre con la producción bajo un sistema inadecuado). La política nos dice que el hombre tiene derecho a la propiedad. Pero ¿cómo decidirán los propietarios privados qué hacer con su propiedad: qué crear, consumir, o comerciar? ¿Funcionarán los mecanismos que gobiernan tales decisiones para promover la vida del hombre? ¿Puede un hombre libre legalmente usar su riqueza de forma que otros hombres, por muy racionales que sean, queden en su poder arbitrario? Al definir las leyes de un mercado libre, un economista correcto responderá a todas esas preguntas; en cuanto a la virtud de la productividad, explicará por qué sólo algo bueno puede sobrevenirle a todo el mundo partiendo del principio de la libertad (y sólo algo malo partiendo de su derogación). En esencia, él completará el argumento a favor de los derechos del hombre al demostrar que, en este como en otros temas, lo moral es lo práctico.

Jerárquicamente, la ciencia de la economía es algo derivado y secundario, que va detrás de la filosofía; puesto que economía presupone política, también presupone moralidad y, por debajo de ella, metafísica y epistemología. Esta es la razón por la que la economía no puede alterar verdades filosóficas y por lo que un economista sin la filosofía correcta (al menos en términos implícitos) está condenado al fracaso; tal hombre no puede ni identificar leyes económicas ni predecir el futuro económico a largo plazo de un país. A pesar de su íntima relación con la filosofía, sin embargo, la economía no forma parte de ella; su preocupación no es con los principios universales de acción humana, sino con una temática especializada.

Aunque estoy asumiendo ciertos principios económicos, por lo tanto, mi objetivo en este capítulo es continuar hablando de política, ofreciendo un análisis filosófico del capitalismo. ¿Qué principios filosóficos y morales encarna el sistema capitalista? Y ¿cuál, por lo tanto, debe ser el efecto de ese sistema sobre la vida del hombre?

En lo que respecta a cuestiones específicamente económicas, junto con todas las objeciones económicas al capitalismo que han sido planteadas por los estatistas, las dejo normalmente para que sean contestadas por economistas racionales. Cualquiera que esté familiarizado con la literatura pro-capitalista – Objetivista o de otro tipo – sabe que esas preguntas ya han sido respondidas, al menos en esencia. También sabe que todas las objeciones económicas al capitalismo que jamás han sido expuestas ya han sido refutadas miles de veces, con suficiente teoría, suficientes hechos, pruebas, referencias históricas, gráficos y notas de pie de página para convencer a cualquiera, excepto al tipo de intelectual que consideraré al final del capítulo.

Hay fallos en la economía clásica, ciertamente, e incluso en su mejor heredero moderno, la escuela austríaca representada por Ludwig Von Mises. Pero el capitalismo no está pereciendo por tales fallos. Está pereciendo por la ausencia de una filosofía racional. Esa ausencia por sí sola explica por qué la abundancia de respuestas económicas que le han sido ofrecidas a nuestro siglo por un pasado mejor han sido ignoradas por el mundo y continuarán siendo ignoradas.

«La economía es valiosísima como complemento a la filosofía. Pero, al igual que un cuerpo sin mente, es inútil e imposible si está desgajada de la filosofía.»

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Referencias

Obras de Ayn Rand en versión original: Ayn Rand Institute
Obras de Ayn Rand traducidas al castellano: https://objetivismo.org/ebooks/

Al referirnos a los libros más frecuentemente citados estamos usando las mismas abreviaturas que en la edición original en inglés: 

AS     (Atlas Shrugged) – La Rebelión de Atlas
CUI    (Capitalism: The Unknown Ideal) – Capitalismo: El Ideal Desconocido
ITOE (Introduction to Objectivist Epistemology) – Introducción a la Epistemología Objetivista
RM    (The Romantic Manifesto) – El Manifiesto Romántico
VOS   (The Virtue of Selfishness) – La Virtud del Egoísmo

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Notas de pie de página

En este capítulo no hay notas de pie de página

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Ayn Rand

El término “deber” destruye más que conceptos individuales; es un asesino metafísico y psicológico: niega todas las cosas esenciales para una visión racional de la vida y hace que se vuelvan inaplicables a las acciones del hombre.

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